...Andabamos jugando a los chaikos, ya era medio tarde y nos alumbraban un poco los copechis, acababamos de llegar del lado del río chiquito, ahi andabamos chirotiando cuando de chiripada me encontre un malacate, entonces escarbamos un pocito y nos encontramos como nueve, pero el chindo fué el más abusivo y se quedó con cuatro, por eso quedamos de acuerdo en jugarnoslos en los chaikos y jugamos a la chira al final me quede con seis, je je je je.

CHAIKOBARRAZA

asi me llamé un tiempo, luego quise endilgarle ese nombre a mi hijo que prefirió llamarse Fernando romo, al final creo que se llama Fernando García, lo averiguo en la próxima función.
Chaikos y Malacates son un buen pretexto...